Page pide acortar el plazo de un año para aplicar las nuevas normas del trasvase y hacerlo antes de verano

Talavera de la Reina, donde el Tajo llega con un escaso caudal y lleno de la mierda que arrastra el agua desde su unión con el Jarama, proveniente de la Comunidad de Madrid, acogió este miércoles el acto del Día Mundial del Agua organizado por el Gobierno de Castilla-La Mancha. Allí, en ese mismo río, es donde uno de los premiados este miércoles, el piragüista talaverano Paco Cubelos, ha entrenado en numerosas ocasiones para convertirse en uno de los campeones de este deporte. Pero también donde se ha cabreado por el lamentable estado que presenta a su paso por su ciudad.

Un acto que fue aprovechado por el presidente castellanomanchego, Emiliano García-Page, para adelantar que el Consejo de Gobierno de la próxima semana aprobará una resolución por la cual reclamará al Ejecutivo de Pedro Sánchez no dejar pasar el año de moratoria contemplado en el nuevo Plan de Cuenca del río Tajo y aplicar las nuevas normas, incluso, antes de verano. Un anuncio que realizó un día antes de la celebración hoy de un Consejo de Gobierno extraordinario, después de que la Generalitat Valenciana y Murcia hayan manifestado que recurrirán los caudales ecológicos que limitan el trasvase Tajo-Segura.

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«Yo soy autónomo y la Constitución me pide defender a mi tierra. El que no entienda esto, no entiende la España de hoy y le hace un flaco favor. Vamos a pedir al Gobierno que no agote el plazo de un año para la reforma de las reglas de explotación del trasvase», afirmó. Con este escenario, se preguntó «por qué esperar un año». «Este es el momento, vamos a instar a que antes del verano tengamos las reglas de explotación conforme se ha aprobado», insistió.

«En el Tajo están representados muchos conceptos y han tenido que pasar 40 años para que no fuera el único río de Europa sin cauce mínimo», recordó. Por eso, cree que «hay muchos motivos no para festejar ni ofender a nadie, pero por si hay alguien atento en el ámbito del río Segura, que sepa que la realidad es que es una de esas cosas que pasan porque hay autonomía».

En su opinión, en Levante, por cada hectárea de secano, hay tres de regadío, mientras que en Castilla-La Mancha hay tres de secano por cada una de regadío. «Que me lo expliquen. Las cuentas son elementales. No es que no tengamos regantes», concluyó García-Page.

El piragüista Paco Cubelos tomó la palabra para mostrarse sorprendido por recibir el galardón y para comprometerse en la defensa de su río, el Tajo. El agua, su «medio natural» y en el que pasa más tiempo dentro que fuera, está en forma de río Tajo ligada a su vida desde hace más de 20 años, gracias al cual descubrió «una ciudad totalmente desconocida».

Eso le ayudó a entender y querer al río, lo que aprovechó para alarmar sobre su estado. «Os invito a montarnos en una piragua para conocer de verdad el estado del río», dijo, asegurando que así se podrá «entender mejor» por lo que está pasando. En cada entrenamiento, recordó, hay piragüistas que limpian el cauce del río mientras «otros lo maltratan», incluso con la celebración de botellones. «Tengo muy claro el lado del que estoy. Y espero que vosotros estéis conmigo», expresó desde el escenario.

Más premiados pasaron por la tribuna para agradecer sus galardones, como Araceli Olmedo, histórica dirigente de los regantes de aguas subterráneas que presidió la comunidad de La Mancha Occidental II. «Me peleé con todo el mundo, y el Acuífero 23 se hizo famoso por ser el peor gestionado del mundo. Los regantes quedamos como los malos, o como los tontos», rememoró Olmedo. «No había justicia, ni siquiera poética».